Veleidades con niños conocidos
Yo me esfuerzo por
enseñarle a los niños que me rodean
que antes de abrir
una puerta hay que decir permiso;
ellos miran a sus
mujeres y piensan que soy una arpía,
los más benévolos
dicen es una mujer con veleidades,
y como les han
dicho que los hombres inteligentes ríen en voz baja,
los imitan en
forma lamentable.
En los costados
del camino los caballos sólo comen las flores azules
yo quisiera llevar
a los niños que me rodean
para que empezaran
a aprender algo sobre el buen gusto,
los caballos son
grandes maestros.
Pero ellos
prefieren la filosofía y morirán sin entender
vestidos de niños
con mediecitas blancas
y con todas las
crueldades absolutas de los niños.
La gente con
veleidades que no creemos en los pecados
del precio, la
venta o la entrega
los miramos jugar
con sus barriletes
y nos ofrecemos
tranquilamente
para que nos
claven en el cuerpo flechas de colores primarios.
Ce triste exil, ce fier exil
En las noches felices con la gente que
amo
él hace sentir su ausencia,
se instala en el amor que me dan,
en el amor que doy,
en el otoño, sí, ya sé, las hojas;
dos amigas caminan por calles
entrañables,
hablan del amor, la vida, los hombres,
se dejan envolver por la dulzura de la
noche de mayo,
hacen a un lado las cosas
irremediables,
caminan solas entre los olores, las
luces de las ventanas,
algún rostro obsesivo que insiste,
insiste,
pero ellas saben tanto sobre el amor,
tanto,
que pueden convertir todo en una charla
brillante
el hombre que desean hasta sentir frío,
el verdadero amor
y el aplastante domingo que hay que
atravesar
para que su voz sea de nuevo
y todo empiece a cobrar vida.
Los amigos que me aman hablan de mis
ojos,
ya sé, son importantes como las hojas
en otoño,
pero todo cae a golpes
en estos domingos para lanas tibias,
hijos que no tengo,
globos de colores en el parque.
Entre ritos familiares se calienta al
sol
impura,
como si hubiera encendido fuego en
viernes
o hubiera cantado en tierra extranjera.
Domingo a la tarde
Cuando se sientan frente a frente
amores imposibles, quincallería
amistosa,
tipos que se atrevieron y esa mujer
intensa
que lleva augurios a felicidades que
nunca entenderá,
la buena gente desecha las malas
palabras,
la buena gente dice todos tienen
posibilidades en la vida,
sienten crecer su amor por esa mujer
intensa,
tan sola, que vivirá siempre detrás
de una ventana
y todo lo que le ofrecen está
demasiado azucarado.
La vida plena
A algunos les han quitado las ganas de
hablar,
pasan mudos por el amor, aman perros
vagabundos
y tienen una piel tan sensible
que nuestros pequeños saludos
cotidianos
pueden producirles heridas casi de
muerte.
Nosotros, seres amables e inofensivos,
miramos los gatos enfermos, las mujeres
con collares
que pasan por la calle
y sentimos un desamor agradable,
casi suficiente.
Soy una mujer sin problemas
Todos lo saben
y entonces buscan mi compañía para
charlar por las noches.
Sin embargo yo conozco a alguien que
quiere morir en paz consigo mismo
y me produce estremecimientos,
insomnio, soledad,
porque la paz conmigo misma sería una
guerra sin fin,
dos o tres asesinatos inevitables y
alguna entrega desmedida
que no entra en mis planes.
Sin embargo yo sueño por las noches
con un jardín inmenso donde los
muertos se levantan para saludarme;
yo sueño con un hombre que me inquieta
y como lo ignora
me habla amigablemente del resto del
mundo
y de mis múltiples amores, tan
simpáticos,
tan apropiados como tema de
conversación.
Le entrego mi nombre a la vida que
sube
Detrás de estos juegos de inteligencia
detrás de nosotros, que estamos en lo
que podemos,
que sólo manejamos vasos al borde de
la lluvia
vinos amicales,
fosforescencias del mar tienen su
nombre,
que yo sólo puedo decir a través de
ojos lánguidos,
sonrisas tristes mi amor devastado.
Tan pobres que éramos,
y ahora los que vienen de Cuba, los que
van hacia Cuba,
entran en mi lenta ternura de mujer que
vive junto a un río
hacen insoportable nuestra miseria.
La vida en serio
Ahora he descubierto el sol, los perros
y las mentiras.
La vida es más lógica, no he dicho
mejor, sino más lógica.
Cierro los ojos y tomo sol, juego con
un perro tan vulgar
que es imposible sentirse separada de
él y miento.
Eso me obliga por las noches a sacarme
los zapatos
como quien se desnuda,
a caminar descalza por mi casa,
a llorar a solas cada tanto.
Ahora miro a una mujer ni linda ni fea,
pienso que la pequeña vida continúa
y que todo dolor importante tiene
testigos,
aunque sean un perro, el sol o las
mentiras.
La literatura en serio
Como sufro y me aburro resulto bastante
divertida,
a veces represento situaciones,
la mujer comprensiva, el hombre triste;
como no tengo sentido de la
oportunidad,
puedo interrumpir la mejor escena de
amor,
y para que nadie dude de mi
inteligencia,
me ocupo de problemas casi ridículos.
Rodeada de gente que espera cosas de la
vida
o practica la tragedia,
mis explosiones de júbilo son bastante
frecuentes,
y como me regalo horizontes, cucharas
que vacían mi corazón,
casi siempre estoy triste,
por eso mi alegría es digna de verse.
*
Una poesía para impresionar
con grandes imposibles olvidos que no
llegan
o esas frases de: tengo para poco
una poesía en realidad para ser un
animal herido entre la gente
para irse a un rincón y tratar de no
molestar
si digo esa poesía ya no me interesa
es porque he empezado a sentir gusto
por la vida en serio.
*
Con el invierno los amigos han vuelto a
casa
yo pregunto seriamente
¿Qué vas a hacer de tu vida juana?
Sufro, amo, todos rabiamos por la
revolución
a veces tengo miedo de que seamos
felices.
Los amigos han vuelto con los brazos
abiertos
preguntan qué pasa en nuestra ciudad,
yo sólo puedo describir tu rostro,
para decirlo de una vez el rostro del
amor.
¿Qué vas a hacer juana
con la juventud que aún te queda,
con las historias inverosímiles
los amigos en solfa,
los amigos en serio
y toda esta ternura
que quién sabe adónde irá a parar?
(De "Mujer de cierto
orden", 1967.)
Dulce post art nouveau
Desde este balcón miro
llover sobre el mar
-Europa provee las imágenes
de afiche I ,
cumple los sueños de barrio
su realidad aumenta la
cursilería y la verdad-
yo hago una lista donde
objetos amados
se mezclan con objetos
necesarios
a los que el agua y la
distancia confunde y a veces ni rescata
todos vuelven sobre esta
calmísima agua
que llega hasta el pie de mi
casa
pocos logran tener una cara
si la palabra tiene valor
esta distancia lo probará
si la palabra es vida y los
que la manejan viven en ella
ésta es la prueba
si ya pensé mi vida o sea
ya la viví
el agua de este mediterráneo
tan muerto
es prueba y respuesta
Aristocracia obrera
Las casas que vimos
construir tienen años
las amplias labias son sólo
discursos de mitómanos
charlas de magisters
cátedra de confusión
no hay olvido ni paz sólo
alguna entrevista pendiente
una carta por escribir
la distancia siempre llegó
demasiado temprano a mis fiestas
mucho más de lo que amé ha
caído en el vértigo de lo ridículo
la poesía es una señorita
esquizofrénica que delira al après-midi
los que ostentaban la escoba
de la historia
cuidan la limpieza de sus
legajos
yo sonrío aunque no haya
laúdes con qué
acompaño a la gente hasta
el ascensor
abandonada, perro de umbral
en las tardes
viejo pecador converso jamás
en silencio
a ver
líneas de las manos
de venus destrozada de apolo
inmejorable
alegrías que no le quitan
profundidad a mi pensamiento
pero sí lo aligeran
recuerdo algún cementerio
sentimental
cierta felicidad de un viaje
nocturno
enloquezco con estilo
mientras los dueños de esta
luz de domingo a la mañana
con un sentido de la
realidad muy argentino
jugados a la precariedad y a
la historia
sobreviven en tensa
vigilancia
ignoran la tranquilidad de
las siglas
no se tranquilizan con
ajenjos marchitos
ahora que todo empieza a
terminar
confiemos en la diferencia
de nuestras muertes
nada las cambiará
menos estas alianzas
pasajeras
las maravillosas delicadezas
y sus culitos pateados
cada vez que muevo esta mano
cambio de lugar un objeto
aparto algún rostro
como en un triunfo de mis
peleas y de mis muertes
o una felicidad de mi final
sé que mis hermanos
desconocidos no me olvidarán
*
Desesperada ya como gente
que conoció ciertas cosas
verdades que no borran ni el
vino
ni los juegos con los que
reemplazamos el amor
con mucha delicadeza mucho
cuidado
buscamos como niños no ya
tréboles de cuatro hojas
no ya la vida plena los
golpes definitivos
para acortar los plazos
ensayamos fracasos que no duelen
pequeños triunfos que
provocan nuestras sonrisas más dulces
bajo mi sueño mis enemigos
–cuidados por mí como por
nadie–
entre el ruido de juana
sus grandes actividades y la
ternura que me provocan
tenemos ideas fijas
obsesivas
verbos que no conjugamos
verbos de acción de
sentimiento
verbos para algún momento
que creí
cercano próximo imposible
gente que estaremos casi
muertos cuando pase algo
no mido lo que falta ni lo
que se fue
duro
defendiendo el pedazo justo
para estar de pie
*
Ahora que tanta gente llama
por teléfono
y tengo invitaciones saludos
en la orilla del camino
he dejado de ser la presa
mayor en una cacería que
después de todo
protagonizaba
he dejado de ser trágica
a veces soy definitiva
con la edad, simplemente,
estoy cada vez más enojada
*
Era fácil quedarme sola
brillante intocable en mi agresividad
tirar los pedazos que aún
valían entre gente conocida
cartas prestigiosas de
desprestigiados
disimular el paso de los
años
su asqueroso pelo infiltrado
con frasecitas jactanciosas
pagar la buena conciencia
con reuniones de seudo peligrosos
dedicarme a la solidaridad
difusa
era tanto más fácil
que entrar a patadas en esta
turbia y compleja realidad
si toda vida es un reemplazo
y no existe el lugar en blanco
el sueño de estar a la
vuelta de esta historia
con aquellos viejos ácratas
revolucionarios principios
es el crujido de la muñeca
de madera en la noche
abandonen la hermosa escena
familiar
no hablen más de un ciego
retrato en colores
sobre él ha caído una
permanencia
la de la sangre
*
Yo te agradeceré
eternamente aquel diálogo
donde vos hablabas y yo
preparaba mi historia
yo te agradeceré
eternamente
haber señalado con un hecho
que la palabra existe
vos hablabas a nadie que
luego fue este animal sin garras
solo en un claro que se
llamó JB
quiero decirte que este
animal de una aldea
o de aquel lujo de vivir que
fue Buenos Aires
sólo escucha a través de
lo que amaste en mito
Pére Lachaise fuentes de
Roma
a aquella niñita que te
escuchaba sin poder contestar
le enseñaste la palabra
que a veces ahora no sabe
dónde buscar
este animal no trata de
repetir los sonidos de la tribu
sino tus sonidos y tu voz
Sólo mata el engaño
Consagré y consagraron mi
vida
a tareas que se cumplirán
sin mí
no veré morir a mi madre
no conoceré el delirio por
un hombre
no viviré en la revolución
*
Ya me he dado cuenta
sólo son escenarios
particulares e indivisibles
hay un único lugar personal
para cada puñalada trapera
de la vida
mi corazón sabe que no hay
olvido ni ruptura
ésos son triunfos ajenos
siempre miraremos por una
ventana
cómo se están llevando a
alguien
Cadáver por la palabra
persona por la gente
Por ejercer el miserable
pecado de la jactancia
manejo huecas trascendencias
solitarias eternidades
o sea
escribo
por escribir a punto estuve
de ser solemne
por escribir pierdo la vida
por mirar a esta gente
descuento mis culpas
lejos de falsas jerarquías
que engendran peste
a punto estuve de integrar
una secta
ave de rapiña de voz de
todos
no entenderé el mundo más
que lo entendido por todos
no olvidaré en el final el
principio
no creeré en el signo sobre
los otros
menos en la luz única sobre
mí
para que mi vida se cumpla
pierdo el tiempo en
confidencias
para escapar al desierto de
los elegidos
borraré toda arista que me
distinga
para que mi lucha no sea
legítimo derecho de soberbia
sólo reconoceré la voz de
los que nunca llegarán
a cumbres de lucidez
torres de talento
verdugos de los demás
ceniza de vidas menores
escribo
no me otorgaré la redención
*
Las décadas no han pasado
yo camino sola en la luz de
la tarde
en las vidas paralelas de
los hombres que he tocado
soy el gran escenario y el
mayor espectáculo
nadie cree en la
desesperación de los inteligentes
ni en los pactos
en los que siempre pierden
los lúcidos
la luz que ahuyenta los
visitantes nocturnos
y alimenta los signos de la
vida
seguirá encendiéndose en
otro lugar
*
Rodeada de universos en
tragedia ineluctable
en tragedia coyuntural en
tragedia analfabeta
rodeada de mundos en
rítmicos caminos hacia la desdicha
he logrado una zona
en la que mi animal sigue a
salvo
hablo a unos pocos muertos
hablo de mi vida
en mis sueños mendigan los
cuerpos que perdí
y casi no tengo compañía
para compartir mármoles funerarios
no necesito la trampa de
mitos menores
me basta nuestra propia
lucidez
y nuestra permanente
tristeza
que no tiene nombre de
persona sino de ciudad
pueden borrarse las huellas
matar la mano que escribió
aquellos poemas
caer en la cátedra y la
impostación
pero yo que tengo memoria de
piedra y corazón de trapo
sé dónde cuándo y de
quién me despedí
*
Acechada por cultos
pensadores que han confundido
la ideología con las
ciencias aplicadas
la ética con el
espontaneísmo
el arte con la habilidad
manual
y la lucha de clases con la
renovación de generaciones
veo cómo los nuevos dueños
de la cultura
han destruido lo que amé y
dado rostro al enemigo
pero minuto a minuto
recuerdo
que no debe quebrantarse el
frente interno
aunque ya ese frente sólo
sean
mi memoria y mi soledad
*
Esperé ser la anfitriona
elemental
de una estructura no
corrompida
ofrecer entregas y apuestas
abandonar mi ciudad sin la
sombra de la sal
ni de su adiós y memoria
viva
ahora soy dueña de un
sistema de condenas y salvaciones
de aceptaciones y rechazos
de una lista de buenos
trabajos
de un lejano sabor a vida
de una única forma de
limpiarme
en soledad
*
H. M.
Que haría yo sin tus flores
que haría yo sin esta
permanencia
de tu gesto y tu lugar
Que haría yo si debiera
pensar
en pérdida olvido y sobre
todo final
Que haría yo si no tuviera
la certidumbre de tu memoria
*
Qué necia salir por esa
ciudad
a recoger mis confidencias
entre adúlteras
poetas de diarios
pueblerinos
burguesías napoleónicas y
analizadas
solitarios a los que no
recuerdo en sus actuales escenarios legales
salvo algunas soledades de
domingo a la tarde en la provincia
alguna etapa antes de volver
al verdadero destino ignorado
qué necia creer que siempre
más allá
había un imperio con toda
su fanfarria
y el exotismo de sus colores
y no sólo este trabajo
mínimo y constante
ser armonioso sin conciliar
unir sin renunciar
sé que largué un bumerang
que todavía no volvió
Luz de gas
Todos pudimos apagar y
encender las hogueras
digamos, las luces
los más inconscientes lo
hicimos
pero yo pregunto
quién tuvo la valentía de
verlas agonizar
y siguió hablando
moviéndose
pensando en las
celebraciones
sonriendo ante las
consecuencias del cambio de estación
la luz que agoniza era una
obra que amaba mi madre
en su fantasía del teatro
pero aquí no habrá
salvadores
lúcidos detectives jóvenes
enamorados
sólo héroes que miran cómo
agonizan
y simulan vivir una vida
¿quién la llamó vida?
sin revolución
*
Supiste quién era
antes de que yo empezara a
sospecharlo
ahora caminando por lejanas
y míticas ciudades
soy tu triunfo
vos hiciste esa figura que
recorre lugares que nunca conocerás
pero son sólo tuyos para
siempre
vos los soñaste yo los
conozco
para mí las fachadas
para vos el deseo
lo único posible de ser
llamado eternidad
*
Tantas flores a la madrugada
tanto vino blanco con los amigos
íntima perdida última
tanta vida para la
literatura
tanta hermosa fantasía
desplegada
corazoncitos en los vidrios
empañados en vez de amor
tanto lúcido ascendente
iluminista buen alumno
aquellos mis amiguitos con
su pacífico partido de izquierda
tanta prueba de amor colgada
de un clavito
tanta vida tirada a los
perros y a los cobardes
el recuerdo de algunos que
en lo mejor de mi vida
en fin cambiemos de tema
después de besar a los
íntimos todos los días
como si fuera la despedida
del alma
puedo asegurarles que no les
crearé ningún problema
soy muy inofensiva
no me pasearé por el mundo
con plumas doradas
ni gritaré a destiempo
sólo que tal va consiga un
bote al exilio
o todo termine en un
claustro con una labor de petit point
*
Yo que moriré vendiendo las
joyas
que nunca tuve
extiendo esta mano como si
blandiera guante de encaje
que no conoció
porque hizo domésticas
tareas
con sentido histórico
hartazgo y cierta dignidad
yo que moriré
espero limpia y perfumada y
es probable con olor a decencia
no olvidaré el escenario
inaugural
donde se encendieron y
apagaron las luces
donde creció mi
adolescencia y murió mi juventud
(De "Regreso a la
patria", Libros de Tierra Firme, 1989.)
Extrañas parejas
siempre volví en olor de
bienvenida
flores animalitos de mis
colores
corazones de papel que son
los que me importan
y ahora entro en una casa
donde
hay que dar la luz y el agua
y no buscar bebida en vaso
limpio no la hay
sólo una voz por el
teléfono
he aceptado entrar en una
casa a oscuras
para que en mi vida no
echara raíces el patetismo
*
comprémosle unos jazmines
es una buena mujer
empecinada en una idea
y esa inutilidad me permite
decir
todo cae a pedazos y al
tigre de papel
tal vez se lo coma un
destructor de documentos
pero hay hijos que no tuve
que volverán a elegir a sus enemigos
y volverán a hacerles
difícil la victoria final
*
los nombres prestigiosos de
mi país
asolan las universidades
españolas en verano
salamanca el escorial
palabras de mis hermanos
zarpazos defensa del islote
conocí a muchos de estos
animales suntuosos
algunas de sus lentejuelas
han caído
y ciertas estrellas tienen
la punta quebrada
pero existe mayor
espectáculo
que viejos magos de mi
juventud
contando una fiesta
terminada
cerrando una a una las casas
de sus orgías
recogiendo las últimas
cintas las últimas botellas vacías
de un país una poesía y
una ciudad errantes
¿Fieras de papel en
ambas orillas?
nuestros mitos se han
permitido sobrevivir
y nos han obligado a
retroceder
ante esa piedra de la
desmemoria
con la que construyen su
mausoleo
no somos la juventud que los
continuará
tampoco el pasado que los
llora
y aunque fuertes y lúcidos
como la historia
queremos educarnos en la
fragilidad del futuro
El sujeto de la izquierda
educada para ser
la magnífica militante de
base de un partido
que por no leer la historia
de mi país
se ha convertido en polvo no
enamorado sino muerto
preparada para una eterna
carrera de fondo
tengo ante los ojos una
pared impenetrable
detrás de la cual sólo hay
otros 50 años de trabajo y
espera
*
otra vez la cruda tarea a mi
cargo
de no aceptar los acuerdos
no aceptar este destino de
joya de tu soledad
otra vez la cruda tarea de
decir
tu final no va a ser mi
final
ser el mundo entero en una
vida es demasiado trabajo
para una mujer un poco mayor
con citas dispersas en varias ciudades
que ya aprendió a no
confundir
el dolor con la vida y la
pasión con la propiedad
Interior con poeta I
una mujer en su casa
se dispone a asar un trozo
de lubina
desde la ventana
ve uno de los triunfos del
urbanismo europeo
y piensa en conseguir la
última edición de Caproni
comerá y leerá en hora y
lugar inadecuados
media tarde apartando las
hojas de una traducción
traducir de un lado del
océano al otro
de los poetas jóvenes a los
poetas de su generación
tradujo aquí su vida que
debe retraducir a su país
Negri dice que el espacio al
que siempre creyó pertenecer
el espacio de la izquierda
sigue existiendo dice
a la madrugada llamará a
una ciudad lejana
y volverá a traducirles a
los objetos que la rodean
las claves de ese lugar en
el que terminarán su vida
Interior con poeta III
Desde mi ventana
silencio de verano silencio
de invierno
veo servir la comida
encenderse las luces
lámparas del atardecer
mesas del mediodía
¿acogerían ellos a una sin
patria?
¿no estaría mi corazón
para siempre en otra tierra?
soy ajena a las ceremonias
de la costumbre
que suelen acogerme para
señalarme extranjera
vidas de espaldas al mar que
es el camino de mi vida
Poetas del 60 I
juntos en cierta lucidez y
varios desprecios
miles de papeles los
nuestros
y siempre el pesado bagaje
de aquella fiesta
miles de papeles los
nuestros
nunca el del buen samaritano
no tuvimos manto suficiente
mucho menos podíamos
ofrecerlo
a través de años y países
la misma soberbia de
demoledores de panteones
el seductor relato de
nuestra memoria
y en mí el nombre de los
que he elegido entre ustedes
que no dejo de repetir
para gloria de críticos
dolor de resentidos y furia de olvidados
en cuanto me ilusiono con
ser escuchada
(De “Interior con
poeta”, Libros de Tierra Firme, 1993.)
IX
Interiores
perdido el primer sentido de
la solidaridad
perdida la solidaridad
horizontal
vecino amigo almacenero de
la esquina
de puertas adentro ya no se
cuenta una vida
dónde han quedado cocinas
renacentistas
casas de los cárpatos
no habrá un museo de
nuestros interiores
cual velo fundamentalista
algunas mujeres han rescatado
un universo derrotado por
mis abuelas
hijos plantas hombres en
permanente distracción o
fantasías literarias
y ellas
regando las plantas del
patio
XVI
las sectas lo han utilizado
el trabajo en la calle la
vida en la calle la seducción de la
noche el sueño imperial de
volver al amanecer
la ambición oculta del
strass los rasos los colores los brillos
siempre los brillos
no se puede vivir del
acontecimiento
no se puede vivir de las
pocas horas de la fiesta
pero cada noche descubro
que faltan mínimos detalles
para cumplir el viaje que
planifico en las mañanas
XIX
para ver el alba
ejercicio periódico en otra
época
debo caminar toda la noche
alimentando crías que nunca
crecerán
ahora sé que hay teorías
para la juventud
ver aparecer la luz recuerda
el primer rechazo
la brutalidad del nacimiento
y teorías para el principio
del final
ver aun aparecer la luz es
recuperar la noche
XXI
los que regresan de la
fiesta
aún atontados en el estado
de bienestar
que ni les pagará sueños
de orígenes negados
pasan por la puerta de mi
casa
y me invitan a volver con
ellos
yo pregunto cuántas etapas
salvajes del sistema
nos quedan por vivir
y sigo escribiendo cada vez
con más copias
XXX
me pidió que llevara unos
libros que le interesaban
y algo de dinero para una
celebración
y me citó en el vestíbulo
de partida de las grandes líneas
cuando en la noche en vez de
él
llegaron los camilleros para
Lourdes
supe que debía irme con su
último regalo
los libros que amo
el dinero para un buen vino
y en el espejo que me
corresponde
el asco a la caridad
y los amados destinos de
esas grandes líneas
XXXVII
los hombres que vuelven en
el sueño
son los que se fueron en la
vida
vuelven con la cara de hoy
y aunque no la conozco debo
aceptarla
vuelven a alabar mi eficacia
a confiarme su currículum
y esperan de mis nuevos y
viejos amigos
de mis atenciones a los que
amo
de algún desinterés que
disimulo por el recuerdo
que yo gestione su
permanencia
en un mapa muerto en el
setenta
a través de consignas de
estación
correos de confidentes
encuentros fortuitos en ciudades
europeas esquelas funerarias
que nos devuelven a escenas
olvidables y cambian el
oprobio en ternura
buscan el tesoro
de la cronología de unos
años que volverían a unir
algunas ideas con algunas
vidas
XXXIX
Stazione termini
en los rincones de casa
aparecen tiradas
las flores de otoño con su
herrumbre
en el cerrado entorno de las
estaciones terminales
siempre hay hoteles
boutiques botones de lujo
que las protegen de su
realidad
bisutería y ropa de
plástico macarras de suburbio mal vestidos
inmigración comida del
altiplano
charangos y sombreros
bordados en plata
en el frío de las calles
europeas
siempre cerca de los trenes
de sus horarios de partida
en los elementos abandonados
entre la llegada y el final
suelen aparecer las primeras
flores del cambio de tiempo
suelen aparecer los que
rescatan nuestra memoria
y nos devuelven la fuerza
para continuar con la explicación
*
el hombre que me compra
flores
se las guarda en el bolsillo
después de dedicármelas
recomienda serenidad ante
mis síntomas y mis pérdidas,
cuando se ha asegurado de
que recuerdo la hora del regreso
me pide que deje de buscar
mi maleta
vuelva a calzarme mis
incómodos zapatos
y busquemos un buen lugar
para comer
S. B. mi corazón joven
marco un número a ciegas
creyendo saber a quién
llamo
en realidad cubro el hueco
de los llamados suspendidos
todo es verdad
la necrológica la fecha
la amiga avisándolo
pero esta noche tu voz
prolijo corrector
vino a consolidar y concluir
aquel gozo
de nuestra amistad
con una cita imprecisa
(De “Partida de las
grandes líneas”, Libros de Tierra Firme, 1997.)
Educada en el vicio de
los hombres
voy a la cocina y me siguen
voy al baño y golpean la
puerta
me despiertan en la noche
para preguntarme si duermo
llaman por teléfono en
todas mis ciudades
para avisarme cuidado con el
vino y la vida literaria
no he perdido padre ni tíos
ni ahijado ni amigos de juventud
por no perder no he perdido
ni editor
ni ese hombre
que ya sombra aún cuida mi
paso en las esquinas
no me han dejado caer de su
mano de su vicio
de su peso de mi corazón
*
en otra vida yo miraba desde
la ventana de un bar
cómo la tormenta aplastaba
las flores azules contra los cordones
contra las paredes
y por ese momento único de
la juventud que dura muy poco
supe que nunca olvidaría
esa escena en que nada aparecía
de lo que amaba me
interesaba o temía
ni novios ni odios ni otros
poetas ni revistas de opinión ni
secretarios de barrio ni
amigos imbuidos de una colonizada cultura pavesiana
sólo las flores azules y la
lluvia
recuerdo el nombre del
pueblo la hora y esa lluvia
que nunca en las décadas
que siguieron confundí con alguna otra
*
el efecto realidad de mis
nuevos amigos poetas
ha sido una vez más borrado
por la realidad
la añoranza de las cartas
nunca sobrevivió
a la presencia del añorado
sin confrontación se habla
del amado
sea este país capillita
literaria o prestigiosa revista
o se juega en los reportajes
con la ingenuidad europea engañada sobre la causa del extrañamiento
pero olvidan que la amada en
medio del frío abulense respondió con claridad cuando le dijeron
quién eres
los nuevos místicos de
trópicos nacionalismos megalópolis orígenes raciales
rescatados en el fracaso
no en la derrota
el derrotado es el campo
popular el espacio consagrado del obrero
rescatados en el fracaso de
unos niños de doble moral que no
resistieron ni la prueba del
trabajo en una ciudad extraña
de unos niños que sólo
supieron sobrevivir en la prebenda y el acomodo
escenarios conocidos a
partir de un lucrativo exilio
han vendido un corazón
tramposo
luego el efecto realidad
suele poner las cosas en su sitio
a cada cual su campo
devastado
a cada cual su justificación
por no volver a la patria añorada
a cada cual su jardincito
*
me pasé la vida entre caras
de muchachos bellos y nobles
los peores apenas atontados
conozco la cara de los
tristes del arte
de los voluntariosos de la
acción cultural
menos la cara de la
perversión
de la trampa de algunos que
acompañan a mis amigas
las mujeres repiten o tienen
su famosa neurosis de
destino
repito la manera de apoyar
el vaso
de acomodar las hombreras
el color que a través de
los años
termina por combinar con
todo porque es siempre el mismo
mis amigas ejercen la
lucidez cotidiana
cambian de marido
y mi ilusión sólo dura
hasta que vuelvo a encontrar
la misma versión de su
soledad
¿siempre siempre el error
de las mujeres?
consuelo que nadie espera
peligro disfrazado de
príncipe
Magdalena con su frasquito
turbamulta de colores
venecianos
huyendo del dragón
¿siempre el mismo vestido
el mismo color el mismo hombre?
Plaza Congreso
I
atravieso plaza congreso
para ir a comer
a casa de mis amigos
si aún quedara un
anarquista como mi tío
y tuviéramos a mano un
archiduque
o aunque fuera un enano
militar de África
pero no hay colonias y menos
bombas
las montañas están a 2.000
kilómetros
y yo soy poco más que una
mujer
en batalla con el silencio y
con las versiones de los exiliados
que sólo logra sostener
algunas guerras privadas
II
me despido de dos jóvenes
poetas
que cruzan la plaza al
amanecer
y en mi escenario de
juventud
me regalan un Hockney
invadido por la bruma
III
puedo seguir cruzando esta
plaza con el molino cerrado
puedo ir a encontrarme
en la esquina de la que era
mi casa con la que era mi amiga
para que me explique
corruptelas municipales que ella llama sindicalismo
puedo soportar que en la
puerta por donde entraron los amigos
a nuestras fiestas y a
nuestro casamiento
haya un guardia de seguridad
y en mi confitería en vez
de un san martín
sirvan bife de chorizo a
buen precio
hasta convertirme en un
grabado fin de siècle
y sin ser columna estar de
pie en medio de las ruinas
*
por qué no puede decirse en
los poemas lo que se dice en las
canciones te quiero con la
fuerza de mi alma yo
espera un poco un poquito
más
si tú me decís ven lo dejo
todo
no puede decirse en los
poemas lo que se dice en las canciones
más allá del verano
después de la década de las flores de
mi black velvet en el Ideal
de Nathalie de la gente linda del
reformismo alguien tiene que
decir hay un consuelo en los
poemas
no todo termina
con ese verano de amaneceres
en barios góticos la place rouge était vide
o con el último hombre de
la madurez
un poema debe decirles en
esta esquina de la pérdida es donde
patinamos con el reverendo
sobre el hielo de la permanencia
*
tierra y memoria tiro sobre
vos
amores de verano y pasiones
provincianas
que sellan y borran la
confusión de la ideología
elementos frágiles banderas
en las manifestaciones
primeros de mayo en el
tenebrismo de Palacios
vísperas con despierta y
canta
la realidad del día a día
con concursos y premios
dónde han caído las
primeras muertes heroicas
tierra y memoria tiro
sobre las muchachas que
llevaron las banderas
y hoy hacen meritorio teatro
de barrio
mientras oigo hablar de
idealismo
repugnante palabra
patrimonio de la derecha
poetas de mi juventud
bares de mi ciudad
colectivos de la madrugada
paso la noche sobre el
océano
para tirar tierra y memoria
sobre toda esa poesía
perdida
*
para mí siempre estará
iluminada
la plaza de los héroes
donde los hirsutos
luchadores
siguen fundando una nación
ellos no dejan de avanzar
vos aun muerto
no dejás de avanzar
y sin carro de la gloria
sin arcángel que te alcance
una corona y menos una espada
permanecés como ellos en mi
obsesión
*
vuelvo a pintar las flores
de mi juventud
vuelvo a ver el amanecer
sin temor
ya nunca nadie podrá
decirme éstas no son horas
veo amanecer como una mujer
no como una joven temerosa
de la ley tu ley
el acero de esta luz para
una mujer sola
que no debe temer sino
decidir
Nocturno
la luz de mis amigos en las
cenas en mi ciudad
el perro de Anouilh que
siempre aúlla para mí
casas de barrio a oscuras
cazadores de lavabos de estación
mi amiga comprándome vino
en el kiosco
un avión esperando para
encender los motores
(De “La ley tu ley”,
Adriana Hidalgo editora, 2000.)
JUANA BIGNOZZI
(ARGENTINA, 1937-2015)
MIL GRACIASSS POR BIGNOZZIARNOS!! BESOS!
ResponderBorrarGracias por esto. Había leído poemas sueltos de Juana Bignozzi; tu selección me ha hecho apreciarla en distintas épocas. Abrazo.
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