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marzo 14, 2011

LA PALABRA MUERTE - J.R. WILCOCK (parte 2)



16.

Tiene un altar sarcófago, féretro de lujo
o casa simple provista por el municipio
o agujero en la tierra en casos extremos
o panza de animal para estilitas
ahogados, alpinistas, domadores.
Es quizá la mas sagrada de todas las palabras.
Por ella toda la vida trabajamos,
para alcanzarla desde lo alto si es posible
y verter los tesoros acumulados
no sobre el altar, sino dentro, nosotros incluidos.

Cada uno le ofrece un inventario diferente,
quien un acueducto, quien una alfombra persa,
quien una vida ejemplar de portero
que cada mañana ha limpiado las escaleras,
quien el descubrimiento de una supernova,
quien una cadena de asaltos,
quien un genocidio, quien la virginidad,
quien sietemil paragolpes cromados,
quien un ensayo sobre la Fuente de Aretusa,
quien cuatro transatlánticos, quien una visión,
no sobre su altar, sino dentro, cuerpo incluido.


17.
 
Vacío, dios, nada, son nombres de cosas,
mensajes claros privados de ruido,
pero si el ruido aumenta y la palabra
se resquebraja, se deshace, se oscurece,
aparece el nombre de lo innombrable,
de aquello que está por fuera del lenguaje,
no vacío como una rarefacción extrema
sino futy gksatyrj rith islej gkbos
no dios como caos ordenado
sino iostpe net ooruti jamosp ner
no nada como ausencia de algo
sino oefryth ki loppru tirp plutje lé
no muerte como ausencia de alguien
sino uero thopa jutfop sertyved.


18.

Quien confundió alguna vez la muerte con el sueño:
el dormido no es un animal,
en el sueño la palabra no desaparece,
la hiena deja a quien duerme, roba el muerto:
en el sueño la palabra no desaparece,
el dormido no es un animal:
quien confundió alguna vez la muerte con el sueño.

 
19.

Piensa en el horror, si tú vivieras, de,
en el balbuceo rabioso de un lenguaje,
ver la nada separarse en horas
y en esas horas reabiertas instalarse
la vieja plebe de las sensaciones
que vueltas palabra y memoria
te invaden como ratas mordedoras,
hacen de gitanos acampados dentro tuyo,
mandan mensajeros por todos los miembros,
montan carpas en tus momentos de descanso,
pelean o se eligen gobiernos,
para proclamar en tu representación
que dentro de no mucho te harás oir,
o mejor desde ahora estás listo para unirte a los otros,
como tú presos del balbuceo rabioso,
como tú arratrados por la danza
que en el ataúd esperabas eludir.


20.

Bajo el signo del orden y el progreso
deben ciudadanos emplearse
muerte para la grandeza de la nación
y siguiendo el ejemplo de los valientes
antepasados que lucharon muerte para darles
un porvenir luminoso muerte,
en los campos y en las fábricas alzando
esta muerte bandera plena de gloria,
estandarte y honor muerte de la estirpe,
ante la cual los pueblos se inclinan
del mundo muerte en señal de respeto,
indefensos arrebatar nuevas conquistas
en el campo del trabajo y del saber
muerte en el pleno respeto de la ley
y de nuestras más queridas instituciones,
en primer lugar muerte la familia
la religión y el ejército muerte,
recorriendo cantando el ya señalado
sendero muerte muerte muerte triunfal
que los conducirá muerte muerte muerte
a la meta añorada muerte muerte
muerte muerte magnífica y progresiva
muerte muerte muerte muerte que les pertenece.

21.

Esta tu lengua quiere decir muerte,
cualquier lengua tiene como deber muerte,
y no hay nada en nosotros que no sea lengua,
por lo que nos es dado coito con la muerte,
o apreciación estética de la muerte,
o física o geométrica de la muerte,
o vida de la familia con la muerte,
comida de muerte, viaje por la muerte,
estar con, de , por, en, sobre, tras la muerte,
hacer tic-tac, zig-zag de muerte a muerte.
Fuego, aire, tierra, agua: muerte,
fuego, aire, tierra: siempre muerte,
fuego, aire: siempre muerte todavía,
fuego: infaltablemente muerte,
nada, silencio, cerco, cuerpo
bajo forma de despojo o de palabra.

"Pero si hablas no estás muerto":
es una manera que tiene la lengua de decir muerte.

"Son los otros los que mueren, no eres tú":
de hecho yo no es, por lo tanto no muere,
mas apenas dices yo le das muerte,
cada yo dicho es un yo asesinado.

Prueba a aproximar el rojo al azul:
también de ellos dos llamea la muerte.


22.


Un amplio vacío curvo
de diámetro infinito,
una esfera cuyo centro
se encuentra en cada punto,
recorrida por moléculas
hechas de átomos vacíos
conteniendo electrones
que no se encuentran
nunca en un lugar determinado.

Eso gira y se menea
en la nada circular
y todo se interpenetra
en milenios instantáneos
resbalando en las líneas
de fuerza imaginarias
sin nunca un choque
ni una acción a distancia.

Hombre, de esta nada
giratoria estás hecho
que no conoce muerte
porque es un despojo vacío
de espacio desocupado
como una vasta mañana
solamente atravesada
por algún pájaro errante.

Pero tú no lo quieres creer,
reúnes tus protones,
neutrones y electrones,
con cuantos de energía
recolectados en los niveles
de todas sus órbitas
y en un supremo esfuerzo
les haces gritar "¡Existo!"
Después girando desapareces.


23.

"Piensa, hombre civil, que eres el último
hombre que queda en la tierra y piensa:
todos los diamantes se han vuelto piedras,
eres el rey de América y de Rusia,
con las libras esterlinas puedes limpiarte el culo
¿pero por qué deberías limpiártelo,
por un escrúpulo hacia los gusanos?
Y como el falo busca a la vulva ausente,
tu lengua va en busca de una oreja,
te pones la máscara de oro de Agamenón
y te miras al espejo pero no te habla,
buscas la Esfinge, pero no te hace preguntas,
lees diarios viejos para reencontrar
la voz inmunda de la raza desaparecida,
avara, hipócrita, asesina, y ladrona,
pero al menos te hablaba, no como ahora,
te mentía, te odiaba, te menospreciaba,
pero te hablaba y a veces te escuchaba,
añoras al juez, al esbirro, al verdugo,
que eran tú mismo reflejado con la máscara,
pero aquellos labios de oro te hablaban,
no como las riquezas de la tierra
que sin las palabras son polvo,
cenizas, jirones, piedras, papeles y metales.
Puedes hacer lo que quieras quien está
solo está muerto".

Pero aquel hombre que era el último
que había quedado sobre la tierra se puso
en la cara la máscara de Agamenón
y se recostó en el sepulcro de Micenas
esperando que Alguno lo viese.


24.

Quien no se hace quemar como un bonzo,
no por eso se salva de las llamas,
cintas de fuego lo envuelven de día,
deberes e injurias rociadas de nafta,
y en sus sueños galopa como un diablo
fustigado por otros diablos que repiten
"dos veces siete liras son seis liras"
"una señora no se rasca el culo"
"quien tiene tres cerdos verdes sube la escalera",
andando con la piel agrietada,
lamido por las liras en combustión,
abatido porque tiene un sólo cerdo verde,
hasta que se le incendian los cabellos
y cae envuelto en las lenguas de fuego
a revolcarse tratando de apagarlas,
para hacer durar aquello que el bonzo hace enseguida.

 
25.

Desapareció con sólo tres meses de edad,
sin conocer lengua ni memoria;
su biografía cubre dos períodos,
el primero se desarrolla en las tinieblas,
fue pez, axolotl, proteo concéntrico,
entre resplandores claros de luz rojiza,
vivió de continuas transfusiones de sangre
en su batiscafo sin ventanilla,
creado de molusco a golem pequeño,
topológicamente su universo
era bastante parecido al nuestro
pero dado vuelta al revés como un guante,
con la parte sólida hacia el exterior
y la parte fluida hacia el interior,
privado de tiempo vivió las secuencias
de la evolución apresuradamente
con indiferencia vegetal,
se cubrió de pelos, desarrolló un cerebro,
siempre a la espera de la inversión,
cuando tuvo ojos los mantuvo cerrados
porque sus intereses eran interiores,
y no teniendo todavía dueños, siervos,
ni ambiciones de carácter verbal,
podía permitirse estar siempre durmiendo,
desnudo, hermafrodita, autosuficiente,
soñando sueños para nosotros indescriptibles
porque eran de argumento demasiado esotérico,
por ejemplo una aceleración imprevista
del latir de la sangre en la madre;
así esta parte de la biografía
permanece en la sombra del no-lenguaje,
se desarrolla en el ámbito de las hipótesis,
ciertamente se sabe que a un cierto punto
conoció el dolor y llorando emergió
del mundo de adentro al mundo de afuera,
la luz lo empujó a abrir los ojos,
el aire lo obligó a respirar,
hasta ahora era un muerto que vivía,
ahora era un viviente y comenzaba a morir;
este período llamado agonía
suele prolongarse por muchos años
pero en su caso fue mucho más breve:
participaron dos pechos,
brazos envolventes, una pantalla,
voces desagradables hasta el final incomprendidas,
baños, almohadones, excrementos, telas,
y un conocimiento creciente
de sí mismo con su germen de historia
que entre rugidos mudos, llamaradas, sombras móviles
y sueños de sombras, de rugidos mudos y llamaradas,
tiene comienzo con la salida del gris
de manchas de colores vagos
recogidas después en un grupo amorfo,
una especie de yo al que se pule
y en tres semanas deviene una esfera
todavía irregular, después perfecta,
que otras impresiones transformarán
gradualmente en un icosaedro
atravesado todavía por imprevistos relámpagos,
estrépitos, acercamientos del techo,
mientras el yo deviene dodecaedro;
aquí se insera parentéticamente
fuera del tiempo y del espacio
un hecho incongruente: aquel yo
deviene el poeta Cyril Tourneur
escribe dos tragedias y retorna
bajo la forma ahora de un cubo,
en grado de saborear otras comidas,
placidez nocturna, hojas de árbol
sobre cielos vidriados de sol,
después se reúne en tetraedro,
su luz no es solamente reflejada,
reconoce a su gorda madre,
pero cada ulterior progreso
arquetípico es detenido
por una insuficiencia cardíaca.

 
26.

Con medias de punto rosadas
con franjas de terciopelo rojo
y crisantemos de lana rosada
sobre los tules del batón
que dejan ver el blanco
desnudo sobre los huesos torneados
subiendo hasta el cuello de vértebras
de donde ha caído el cráneo
wo alle Glut verstab
und alle Glut verstab
vom Monde leichenfarb
a los pies del esqueleto
para rodar en silencio
tauchend in die Aschen
und tauchend in die Aschen
die bleichen Finger ein
envidia su vida,
aquel vivo rodar,
las medias de punto rosadas
las franjas de terciopelo rojo
los crisantemos de lana rosada
en el esqueleto incompleto
mit Suchen Tasten Haschen
und Suchen Tasten Haschen
wird es noch einmal Schein
pero en cambio tú estás muerto,
ni la mandíbula perdida
pronunciaría tu nombre.


27.

Despeñadero  y  garganta sin anfractuosidades,
con sólo el viento que no mueve
nada donde nada se mueve,
sin animales ni vegetales,
sombra en la sombra sideral,
que de pronto inundan luz alegre,
húmedas plantas coloridas,
fauna gentil a los ojos humanos.
La metemorfosis es verbal.
De otra forma las palabras
que hacen de la muerte vida
y de la vida muerte no podrían
hacer de esta luz alegre
y húmedas plantas coloridas
y fauna querida a los ojos humanos
sombra en la sombra sideral,
sin animales ni vegetales,
con sólo el viento que no mueve
nada donde nada se mueve,
despeñadero y garganta sin anfractuosidades.


28.

Los ojos nublados, las extremidades contraídas,
entras en el regazo de la enfermedad,
en el fluído amniótico de la no voluntad,
te recorre la sangre verde del dolor,
pero hasta que no puedes hablar no puedes nacer.

Vuelves a la oscuridad de la no-espera,
dependes solamente de la luna,
te vuelves solitario y sin nombre,
eres casi restituido a la materia,
pero hasta que no hay palabra no hay vida.

Ciego, no escuchas a los ruidos atenuados,
eres una masa de sufrimiento desnuda,
un palpitar te envuelve sin tiempo
entre cortinas negras como para un parto,
pero hasta que no puedes pensar no puedes nacer.


29.

Coma o gruta estrellada de murientes,
galería de escarcha sin sintaxis,
esferoide inmóvil sin gravitación,
navecita espacial sin ruido,
coma o amnios de murientes solitarios
que vuelven angelicales las vidas infames
cuando las vuelven mudas finalmente
proyectando hacia atrás estalactitas
de decoro sobre las últimas palabrasa
tan abyectas como las precedentes,
coma o aureola de los inicuos murientes,
calle geométrica de cristales de hielo,
lago perfectamente navegable,
nube como vasto albergue de lujo
pero deshabitado, servido por invisibles,
estación de lavado de cerebro
sucio de sustantivos e imperativos,
coma o coco final de los murientes
que los vuelve topos, peces, lagartijas,
y con estertores rítmicos  bestias que duermen,
molino sutilísimo del lenguaje,
globo de luz en cuyo centro navega
la indiferencia muda del homo sapiens,
descompresor frío donde se gasifica
con todas las otras la palabra muerte.


30.

Cruza la zanja, salta el cerco,
desata las riendas, afloja la mordida,
emprende la carrera inclinando el cuello
de la yegua de tí mismo,
la vida es correr hacia la muerte,
muerte violenta, muerte de héroe,
muerte accidental, horripilante,
muerte imprevista, muerte inmadura,
muerte de hierro, fuego, horca,
salta la zanja, cruza el cerco,
sostente firme en los estribos,
sabes adónde vas, la fea muerte,
corre a combatir con la muerte,
palidez, hielo, languidez de muerte,
vadea los tres ríos, abre el candado,
brinca veloz, fústate a ti mismo,
vas a la muerte, vienes de la muerte,
provoca, acelera tu muerte,
te expones a muerte, te tiras a muerte,
la muerte del justo, culto de muerte,
en el lecho de la muerte, en el acto de la muerte,
cabalga esbelto entre la vida y la muerte,
después de aquel arco toma a la izquierda,
cansa al caballo, debes llegar,
la buena muerte, listo para la muerte,
muerte gloriosa, muerte aparente,
condena de muerte, sentencia de muerte,
ángel de la muerte, autor de muchas muertes,
con potestad de vida y de muerte,
viola el silencio de la muerte,
muerte voluntaria, reo de muerte,
debes sostener el aspecto de a muerte,
grita: ¡a muerte! ¡a la muerte!
la muerte de la rata, del conde Ugolino,
galopa cuesta abajo, pasa a los otros,
fústate los flancos, no te reserves,
duerme en los brazos de la muerte,
sueño hermano de la pálida muerte,
no está abolida la pena de muerte,
hoz de la muerte, esqueleto de la muerte,
canto a la muerte, anuncios de muerte,
declaración de muerte presunta,
a punto de morir, hermana muerte,
en tu hermoso rostro hermosa parecerá la muerte,
no te detengas, salta el arroyo,
alcanza el monte, estás por llegar,
la sorda, avara, rapaz, enjuta,
cruel, fiera, despiadada muerte,
sufres mil muertes, dolores de muerte,
entre gritos de muertes y alaridos de muerte,
verás la muerte con tus ojos,
olor de muerte, muerte civil,
muerte de un reino, de una institución,
la muerte de la liebre, de los calamaretis,
la muerte de los hongos, triunfo de la muerte,
rápido, es cuestión de vida o muerte.





Traducción de Guillermo Piro
Fuente: Diario de Poesía Nº 66, Buenos Aires, diciembre, 2003.





JUAN RODOLFO WILCOCK (ARGENTINA, 1919-1978).


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